Hacer una cena de Nochevieja saludable es más fácil de lo que parece: no se trata de “comer poco”, sino de elegir ingredientes de calidad, priorizar verduras y proteínas magras, usar técnicas ligeras (horno, vapor, plancha) y cuidar las porciones. Así disfrutas del sabor navideño sin acabar pesado y empiezas el año con mejor digestión y energía.

Ideas de recetas para un menú saludable de fin de año

Entrantes (ligeros y elegantes)

• Crema de calabaza y zanahoria con jengibre y un toque de aceite de oliva virgen extra

• Ensalada templada de langostinos con aguacate, rúcula y cítricos

• Tartar de salmón con pepino, lima y eneldo

Plato principal

• Merluza o bacalao al horno con verduras (calabacín, pimiento, cebolla) y limón

• Solomillo de pavo en salsa suave de champiñones (sin nata: con caldo y un toque de yogur natural).

• Lomo de salmón con costra de pistacho y hierbas, acompañado de espárragos o brócoli al vapor.

Postre “sin exceso”

• Yogur griego natural con frutos rojos y nueces (dulce, saciante y equilibrado).

• Manzana asada con canela y un toque de cacao puro.

• Mousse rápida de cacao y aguacate (cacao puro + aguacate + plátano maduro): sorprende y queda muy cremosa.

Y recuerda: cuidarte también es celebrar. Una cena de Nochevieja saludable no te quita fiesta, te da bienestar: más energía, mejor descanso y un comienzo de año con buen sabor de boca (y de cuerpo). Brinda por lo que viene, por lo aprendido y por todo lo bueno que estás construyendo.

¡Feliz Año Nuevo! Que este año te traiga salud, calma y muchas razones para sonreír.